Mucho se habla últimamente en estos tiempos de la alimentación, cada vez parece ser que somos mas conscientes de lo que comemos, de como lo comemos y en consecuencia de si es correcto o no. Porque estoy segura de que si nos preguntamos cada uno de donde es la leche que tomamos, de donde proviene la carne que ingerimos o el proceso de elaboracion de cualquier tipo de bolleria; no sabriamos que contestar.
Y es que eso de que nos lo dejen todo casi hecho, tan bien envasado hace que no sepamos nada de ese producto y además al estar tan manipulado hace que sea muy poco natural.
Estamos inmersos en una era en donde cosas tan simples como cuidarse, mantenerse en forma e ir al gimnasio parecen estar en su gran momento. Gracias a la moda y las últimas tendencias llevar unas bambas hoy en día ya no esta mal visto, al contrario están pleno auge.
Sino que me digan a estas alturas quien no tiene unas Converse, New Balance, Vans o Air Max. Llevar un estilo de vida activo y sano viene relacionado directamente con la alimentación, sin duda.
Palabras como soja, tofu, macrobiótica, veganismo y un largo etcétera suenan raro pero para la gente que vive ese estilo de vida desde hace tiempo, eso es más que una simple moda.
Sino que me digan a estas alturas quien no tiene unas Converse, New Balance, Vans o Air Max. Llevar un estilo de vida activo y sano viene relacionado directamente con la alimentación, sin duda.
Palabras como soja, tofu, macrobiótica, veganismo y un largo etcétera suenan raro pero para la gente que vive ese estilo de vida desde hace tiempo, eso es más que una simple moda.
Cada vez somos más conscientes de que somos lo que comemos y que nos guste o no muchas enfermedades tienen influencia directa en los que ingerimos .
Así que uno mismo es dueño de elegir la forma en la que se alimenta pero en mi interior hace tiempo que existe una gran curiosidad por este nuevo concepto de alimentación.
Mi ciudad por fin cuenta con un restaurante con esta alimentación, su dueño Óscar, según mi punto de vista, lo considero un visionario y todo un emprendedor.
Como bien os comentaba anteriormente acudir a este nuevo restaurante era una cita obligada y porque no decirlo, ya era hora de que abrieran un restaurante así. Diferente de lo común lo describirá bien.
El nombre elegido es integral; porque este nombré? Simple! Algo integral es que comprende todos los elementos que puede tener para ser completo. Un mensaje subliminal dirigido a los clientes que se adentran en este local.
Integral se llama también la última empresa en la que he trabajado y que mejor que acudir a esta cita que con mi antigua encargada hoy en día y fuera del trabajo ya considerada amiga.
Precisamente hace una semana de este descubrimiento y aún recuerdo la experiencia tan buena que ha sido. Las dos salimos encantadas de allí, no sólo por lo que pudimos degustar sino también por el trato recibido y las sensaciones que se experimentan al estar ahí.
Sólo al entrar ya se respira calidez y un ambiente familiar que creo que es difícil conseguir en un primer momento. Siguiendo por lo sensorial te invitan a un viaje de "fuera estrés" con su elección de música que suena de fondo acorde con el momento del servicio, piano, vocales, Bossa Nova, Jazz…
No podemos dejar atrás el aspecto visual y es que han elegido una decoración de estilo nórdico con algún detalle de vintage, que se refleja por todos los rincones del local.
Con algún toque más minimalista para la cocina que se encuentra justo en el centro neurálgico, junto a una gran planta o pequeño árbol que han conservado dentro una especie de vitrina que nos recuerda que es vegetal la mayoría de lo que se consume ahí.
Con algún toque más minimalista para la cocina que se encuentra justo en el centro neurálgico, junto a una gran planta o pequeño árbol que han conservado dentro una especie de vitrina que nos recuerda que es vegetal la mayoría de lo que se consume ahí.
Elegimos una de las mesas para dos del centro, justo delante de la cocina; Mariona se sentó en una silla muy original yo preferí el asiento con respaldo de madera y dos cojines a los lados.
Una mesita muy íntima con un porta vela que seguro lo han decorado ellos mismos y unos cubre platos hechos de papel 100x 100 reciclado.
Enseguida vendría Isabel para darnos una calurosa bienvenida y nos ofreció dos pizarritas pequeñas en forma de carta.
Los mediodías de lunes a viernes ofrecen un menú muy asequible pero como fuimos por la noche queríamos probar un poco de todo.
Al rato volvió a preguntarnos si sabíamos de que iba un poco esto y le dijimos que no, así nos empezó a explicar cada uno de los platos muy detalladamente.
Decidimos pedir dos platos como entrantes para compartir ;uno era carpaccio de calabacín con una vinagreta muy buena y el otro eran unas croquetas de mijo y calabaza acompañadas de una completa ensalada.
El "mijo" es un cereal muy energético e importante para una dieta sana y equilibrada.
De segundo Mariona pidió un cuscus y yo un seitan. Para beber me pedí agua y Mariona se pidió cerveza biologica.
Decidimos pedir dos platos como entrantes para compartir ;uno era carpaccio de calabacín con una vinagreta muy buena y el otro eran unas croquetas de mijo y calabaza acompañadas de una completa ensalada.
El "mijo" es un cereal muy energético e importante para una dieta sana y equilibrada.
De segundo Mariona pidió un cuscus y yo un seitan. Para beber me pedí agua y Mariona se pidió cerveza biologica.
Mientras esperábamos los primeros nos trajeron pan en una pequeña panerita, que podíamos aderezar con un aceite biológico y gomasio.
El pan era de harina integral 100% y el aceite Vell Berd un aceite biológico de Borrassà. Yo obviamente nunca hacia oído la palabra "gomasio" así que no dude en preguntarle a Isabel.
Es un condimento japonés a base de semillas de sésamo y sal marina, que aporta proteínas, ácidos grasos esenciales, fibra, calcio, hierro y otros oligoelementos imprescindibles
Este nutritivo condimento no sólo aporta un sabor bastante especial a todos los platos, sino que además contiene una serie de aminoácidos, vitaminas y minerales que tu cuerpo agradecerá.
Tengo que decir que ese pan estaba realmente bueno, con un sabor a pan casero muy natural y el gomasio es como si le echáramos sal al pan pero en versión sana.
También nos trajeron un hummus de remolacha para degustar que cuando me dijeron que era de remolacha me echaba para atrás pero al probarlo me trague mis palabras porque estaba buenísimo. Un sabor muy fresco y que untado con pan hacían buen maridaje.
La verdad es que aprendí que la verdura se puede cocinar de muchas maneras posibles y que con las semillas y las salsas se pueden crear platos asombrosos y súper sanos. Cambió mi pensamiento de que las verduras para nada son aburridas. Y quedamos llenas pero no pesadas como con otras comidas.
El personal es excelente; Isabel nos estuvo dando una charla de este tipo de alimentación y me respondió a todas mis preguntas y dudas (y ya sábeis lo curiosa que soy). Con mucha amabilidad y preocupándose en todo momento si nos gustaba la comida y si estábamos contentas.
Los postres no podían faltar en esta experiencia culinaria así que yo para no variar me decante por el chocolate; en concreto un cremoso de chocolate y avena, con naranja natural y un toque de mermelada amarga y Mariona un cremoso de soja, con cereales crujientes de espelta y coulis de fresa (todo lógicamente bio).
Como nota final pedimos cafés ;el mío era con leche de arroz que es la más dulce y azúcar de coco que según me dijo es el único azúcar sano.
Al terminar teníamos una sensación de querer quedarnos ahí más tiempo y es que la atmósfera que hay es muy agradable y te da pena irte.
Os recomiendo esta experiencia a todos, es una cita obligada a todos los residentes de Figueres, gente que le gusté cuidarse o probar cosas nuevas. Cocina de autor, sana y diferente a todo lo que hayáis probado.
Saldréis encantados!
Y para los más curiosos sobre este tema( como yo) y que no sepáis mucho (también como yo); os dejo unas definiciones básicas sobre este tipo de alimentación.
El vegetarianismo, también conocido como vegetarismo, es el régimen alimentario que tiene como principio la abstención de carne y pescado, y en ocasiones la de otros alimentos de origen animal, como el huevo, la leche, la gelatina o la miel.
Con frecuencia, la dieta vegetariana no se reduce únicamente a la nutrición, ya que es probable que también se adopte una actitud y un estilo de vida que rechaza otras formas de utilización de los animales para producir bienes de consumo o para la diversión humana; igualmente, se puede tender a una alimentación apoyada en principios ecologistas y naturistas.
Dentro de la práctica vegetariana hay distintos tipos y grados. Quienes no admiten ninguna ingesta de productos derivados de los animales (como el huevo o los lácteos) son denominados vegetarianos estrictos o vegetarianos puros.
Aquellos que sí consumen leche se conocen como lactovegetarianos, aquellos que consumen huevos son denominados ovovegetarianos y quienes consumen ambos productos, ovolactovegetarianos.
Aquellos que sí consumen leche se conocen como lactovegetarianos, aquellos que consumen huevos son denominados ovovegetarianos y quienes consumen ambos productos, ovolactovegetarianos.
En la dieta vegetariana sí se acepta la cocción de los alimentos y el consumo de productos refinados (los más comunes son el azúcar y la harina), además de pastas blancas, frituras y alimentos en conserva o a los que se le han añadido colorantes o preservadores. Esto lo diferencia de otros tipos de dietas, como la macrobiótica y naturista.
El «veganismo» es la práctica de abstenerse del uso de alimentos o artículos de consumo de origen animal. Así mismo, también indica seguir la filosofía asociada que rechaza la condición de mercancía de los animales. A quien practica el veganismo se le conoce como vegano.
A veces se plantean distinciones entre diferentes categorías de veganismo:
- El «veganismo alimenticio», también conocido como alimentación vegana, dieta vegana ovegetarianismo estricto implica no solo la abstención de consumir cualquier tipo de carnesino también todo alimento de origen animal, como los huevos, la leche y otras sustancias derivadas o producidas por animales, tales como la miel. Esto diferencia a quienes siguen una dieta vegana de quienes siguen una ovolactovegetariana (a veces llamada simplemente vegetariana) en tanto estos últimos sí consumen huevos, lácteos y derivados no cárnicos de origen animal.
- El «veganismo ético» se aplica a menudo a aquellos que además de seguir una dieta vegana, también extienden dicha filosofía a otras áreas de sus vidas y se oponen al uso, para cualquier propósito, de animales o productos de origen animal.Esto implica, entre otros, el rechazo al uso de prendas de origen animal como piel y cuero así como el rechazo la realización de espectáculos con animales como algunos circos y las corridas de toros.
- Otra frase utilizada es el «veganismo ambiental», que se refiere a evitar el uso de productos de origen animal basándose en la premisa de que la captura o cría industrial de animales además de ser perjudicial para el medio ambiente es insostenible.
La alimentación macrobiótica define una manera de comer basada en el principio de equilibrio del Yin y el Yang y consiste en una adaptación de las tradiciones culinarias de Extremo Oriente, donde alimentación, medicina e incluso espiritualidad a menudo se presentan imbricadas.
Aun así, se encuentran principios equivalentes a los de la alimentación macrobiótica en la mayoría de cocinas ancestrales del mundo entero, incluso en las occidentales (en especial el hecho de tomar cereales y otras gramíneas como alimento de base, bajo forma de grano o de harina).
La macrobiótica consiste en una enseñanza global que tiene como objetivo final el desarrollo del juicio o entendimiento humano. Desde este punto de vista, se la puede considerar como una técnica de evolución personal, de la misma manera que el yoga, el budō japonés en su esencia o las diversas disciplinas espirituales.
En definitiva, se puede definir la "manera macrobiótica de comer" de diversas maneras, todas ellas correctas: como un camino de desarrollo personal global, que permite mejorar el estado de conciencia, como un régimen bueno para la salud o incluso como una medicina natural; todo depende del nivel en el cual se la sitúa.
El crudismo o alimentación crudista (Raw) es la práctica de consumir alimentos sin cocinar, no procesados y a menudo orgánicos en un porcentaje bastante alto (60-100%) de la dieta.
Dependiendo del tipo de estilo de vida y resultados deseados, las dietas crudistas pueden incluir una selección de frutas crudas, frutos secos, semillas (incluyendo germinadas)
Comúnmente los crudívoros sostienen que cuanto más crudista sea una dieta, más beneficioso es para la salud.
